domingo, 23 de mayo de 2010

en el país de los ciegos


"(Un joven que se ha establecido en medio de una tribu aislada, de gentes ciegas de nacimiento, es examinado por los doctores de la tribu).

"En seguida uno de los ancianos, que meditaba profundamente, tuvo una idea. Era el gran doctor de aquellas gentes, su hechicero; tenía una inteligencia muy filosófica e inventiva, y se le ocurrió la idea de curar a Núñez de sus peculiaridades. Un día volvió a hablar de Núñez en presencia de Yacob.
-He examinado a Bogotá -dijo-, y para mí el caso es claro. Creo muy probable que pueda ser curado. 
-Es lo que yo he supuesto siempre -dijo el viejo Yacob.
-Tiene el cerebro afectado -dijo el doctor ciego.
Los ancianos asintieron.
-Pero ¿qué es lo que le afecta?
-¡Ah! -dijo el viejo Yacob.
-Esto -añadió el doctor, contestando a su propia pregunta-. Esas cosas extrañas que llaman ojos, y que existen para hacer en la cara unas agradables y suaves depresiones, en el caso de Bogotá están enfermos, de tal suerte que afectan al cerebro. Están muy distendidos, tiene pestañas, los párpados se le mueven y, en consecuencia, su cerebro está en un estado constante de irritación y distracción.
-¿Sí? -preguntó el viejo Yacob-. ¿Sí?
-Y creo que puedo decir con bastante certeza que, para curarlo por completo, todo lo que tenemos que hacer es una fácil y sencilla operación quirúrgica, a saber: quitarle esos cuerpos irritantes.
-¿Y quedará sano entonces?
-Entonces quedará perfectamente sano, y será un ciudadano admirable.
-¡Demos gracias al cielo por la ciencia! -exclamó el viejo Yacob, en inmediatamente fue a comunicarle a Núñez sus felices esperanzas"

H.G. Wells